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La Universidad Católica del Cibao (UCATECI) llevó a cabo la Septuagésima Octava Graduación Ordinaria en la Plaza Universitaria de su Campus Principal, presidida por el rector, el Rvdo. P. Dr. Sergio de la Cruz de los Santos. Durante la ceremonia, se invistieron 501 nuevos profesionales en niveles de grado y posgrado.

Formaron parte de la mesa de honor: S.E.R. Mons. Carlos Tomás Morel Diplán, obispo electo de la Diócesis de La Vega; el orador invitado, Juan Jiménez, economista y político dominicano; el Rvdo. P. Dr. Isaac García, rector de la Universidad Católica Nordestana (UCNE); la Ing. Marilyn Díaz, rectora de la Universidad Tecnológica del Cibao Oriental (UTECO); y el Dr. Emilio Mínguez, rector de la Universidad del Caribe (UNICARIBE). También estuvieron presentes el M. G. Dr. Francisco Ovalle (ERD), rector de la Universidad Nacional para la Defensa “General Juan Pablo Duarte y Díez” (UNADE); la Dra. Magdalena Cruz, asesora de Gestión y Desarrollo Institucional de la Universidad Abierta para Adultos (UAPA), en representación de la rectora de esa institución académica, Alejandra Hernández; y Mons. Antonio Camilo González, obispo emérito de la Diócesis de La Vega y Ex Gran Canciller de esta casa de estudios.

Mons. Carlos Tomás Morel Diplán, en la invocación al Señor, hizo hincapié en la importancia de la familia y el círculo de apoyo con el que han contado los estudiantes para llegar hasta este gran día. De igual forma, recordó la invitación del papa Francisco de promover el valor de la esperanza: “Estos graduandos son un espacio de esperanza”, al tiempo que los instó a seguir materializando sus sueños.

En su discurso central, el rector invitó a los graduandos a que no solo apreciaran sus títulos como un documento que avala sus estudios, sino como un compromiso para utilizar sus talentos y servir a los demás, apegados a los principios corporativos y de responsabilidad social de la UCATECI. De la Cruz también expresó la importancia de reconocer los logros propios y saber aprovecharlos para servir a los demás: “Recuerden siempre que su verdadero éxito radica no solo en lo que han logrado y puedan lograr, sino también en cómo lo potencialicen y cultiven para el servicio y el bienestar común.”

Juan Ariel Jiménez Núñez, el orador invitado, inspiró a los graduandos con sus conmovedoras palabras: “Ustedes están escribiendo su historia y tienen la oportunidad de que sea una historia que transforme a otros”. También resaltó la importancia de la humildad y de las pequeñas acciones: “Como profesionales, tendrán muchas oportunidades para buscar la grandeza. No hay nada malo en aspirar a más. Pero no pierdan de vista el valor de las pequeñas cosas: un gesto amable, una palabra de aliento, una tarea bien hecha. Estas acciones, aunque parezcan simples, jamás pasan desapercibidas, construyen el tejido de una vida que deja una huella imborrable”.

De los graduandos, un 14.37% pertenece a la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales, un 36.53% a la Facultad de Ciencias de la Salud, un 8.78% a la Facultad de Negocios, un 22.16% a la Facultad de Ingenierías, un 8.78% al Programa de Educación Superior para Adultos (PESA) y un 9.38 % a la Escuela de Posgrado.

Es importante resaltar que, durante la ceremonia de investidura, se entregaron los primeros títulos de doctorado de la UCATECI, correspondientes a la primera cohorte del programa académico en Ciencias de la Educación, y la conclusión del primer programa de doble titulación y con reconocimiento internacional llevado a cabo en nuestra academia.

En la ceremonia, Domingo Antonio Capellán de la Cruz, estudiante con los máximos honores de la Escuela Educación, mención Educación Física, pronunció las palabras en nombre de los graduandos, en las que afirmó: “El país necesita personas comprometidas, personas que trabajen con ética, respeto y pasión. Somos la generación que puede marcar la diferencia y cambiar la narrativa hacia un futuro mejor. Esta promesa no solo implica trabajar por nuestras metas, sino también ser un ejemplo en nuestra comunidad y actuar siempre con integridad”.

Por su parte, Amaira González Alburquerque, estudiante con el índice más sobresaliente del doctorado en Ciencias de la Educación, sostuvo que “el compromiso moral y ético que asumimos al recibir este título debe reflejarse en nuestras relaciones diarias y en nuestra manera de actuar. El mundo necesita profesionales comprometidos con la transformación social. Debemos ser ejemplos de integridad, tomar decisiones alineadas con nuestros valores más profundos y ser una inspiración para las generaciones venideras”.

A este acto de graduación ordinaria asistieron los honorables miembros de la Fundación Prouniversidad Católica del Cibao y de la Junta de Directores; así como autoridades eclesiásticas y civiles de la región y el país.

El acto se transmitió en vivo a través de los canales digitales oficiales de la UCATECI, YouTube y Facebook, así como por La Voz de María y Radio Santa María, en sus frecuencias 590 AM y 97.9 FM, lo que permitió que miles de personas fueran partícipes de este evento tan significativo.

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